Monseñor Eduardo Martín cerca de los jóvenes.

El Arzobispo Eduardo Martín nos visitó este miércoles 15 de abril y compartimos un momento de encuentro y cercanía. Nos expresó la importancia de la educación y alentó a nuestros jóvenes  a vivir la vocación docente desde la misión, buscando el diálogo y la escucha atenta hacia el otro. 

Recibimos sus palabras, tan cercanas y tan precisas, a través de las cuales nos animó a continuar llevando esperanza y un mensaje de fe y alegría hacia niños y jóvenes.

Finalmente nos dejó su bendición, que se hace extensiva a todos los miembros de nuestra comunidad.

Agradecemos el tiempo que nos regaló y esperamos que pronto vuelva a esta casa que también es suya.

También te invitamos a ver este hermoso video realizado por la Hna Silvia.

Encuentros que fortalecen...

Los y las docentes nos reunimos en la primer reunión plenaria de este año para compartir información y como siempre generar un espacio de encuentro para afianzar vínculos y para trabajar juntos por y para nuestros/as jóvenes. Así nos reunimos en una mesa...

"Una mesa que es firme, como una roca.

Una mesa que surge del agua viva.

...Una mesa donde todos podemos tomar fuerza.

... Una mesa que recibe sobre todo a los que dan lo mejor de sí

...En una mesa a la que nos acercamos también como sembradores,

no tanto como cosecheros.

...Una mesa en la que no hay competencia, sino colaboración.

...Una mesa en la que los cuidadores de la vida 

encuentran el sentido del cómo hacer su tarea.

... Una mesa en la que María, animada por el Espíritu, 

nos sigue invitando a hacer lo que Jesús nos diga.

... Una mesa disponible y que se amplía,

para que todos y todas puedan tener su lugar."

(Hagan Click sobre la imagen para recorrer nuestra mesa)

Con la alegría del inicio.

Y ahora sí comienzan las clases con toda la energía y la alegría de encontrarnos y reencontrarnos para dar inicio a un nuevo ciclo lectivo.
Buen año  para nuestros/as queridos/as jóvenes, de muchos aprendizajes, de enriquecedoras experiencias y de crecimiento personal junto a otros que comparten la misma vocación.
¡Qué nuestra Madre Auxiliadora los acompañe en cada paso!